La localidad de Beas es muy conocida en la provincia de Huelva, entre otras cosas, por su Belén Viviente, el más antiguo de Andalucía.
Desde el pasado 25 de noviembre y hasta el próximo 2 de enero, podemos visitar su 47 edición, que este año abre sus puertas bajo el título “El Belén de los pobres”.
El Belén Viviente de Beas está dedicado a aquellas personas que no pueden disfrutar de una vida digna, como los refugiados, los niños acogidos, los ancianos sin recursos, los presos o los discapacitados, señalan desde la organización. Por este motivo, la Hermandad ha hecho entrega de unos galardones a las entidades que se ocupan de todos ellos, como Caritas, Manos Unidas, Secretariado de Migraciones, Pastoral penitenciaria, Ciudad de los Niños, Residencia de ancianos de Clarines, Obras Cristianas de Gibraleón y el Obispado de Huelva.
Todo ello ha tenido su reflejo en el Belén de este año. Así, por ejemplo, el Portal se ha instalado debajo de un puente, haciendo referencia al Puente de los Pobres de la localidad, que era el lugar donde se refugiaban los pobres que no tenían cobijo. Además, no han querido pasar por alto el nombramiento de Huelva como la capital gastronómica 2017, haciendo para ello una exhibición de los productos de nuestra tierra en las escenas del mercado, la pescadería o la matanza.
