Una barrica es un recipiente grande de madera que se utiliza para envejecer los vinos. Además, su importancia radica en que oxigena y fusiona los matices propios, haciendo que el vino gane en complejidad e intensidad, pero sin perder sus aromas primarios, como los frutales.
Tiene una capacidad de 220 litros y en un principio se usaban para transportar los vinos.
Las barricas se pueden fabricar con tipos de madera diferentes, como el pino, la haya o el cerezo, pero con el paso del tiempo, el roble se ha impuesto al resto de maderas. Esto se debe a la abundancia y resistencia frente al resto de maderas, y a que las propiedades de la madera de roble ofrecen al vino una cesión adecuada de componentes tánicos y aromas, adquiriendo mayor suavidad y equilibrio.
TIPOS DE MADERA DE ROBLE
- El Roble Español es más escaso, tiene gran potencial para la crianza de vinos tintos de sutiles aromas de cereza y arándanos, frescos y bien estructurados.
- El Roble Americano le da una notable textura a vainilla, son más resistentes y porosas, aporta menos taninos al vino, pero una mayor variedad de aromas.
- El Roble Francés es más blando, transmite sus cualidades de una forma más pausada, cede más taninos y se destacan los sabores a fruto seco, tabaco y miel
El tipo de barrica se escogerá en función del vino que se quiera elaborar y del carácter que se le quiera dar.